Yo no escribo lo que quiero
sino lo que quiere en mí,
y lo que quiere en mí quiere
es lo que escribo, sí, sí.
No elijo, soy elegido,
yo sólo presto atención
a eso que viene de adentro,
que me susurra una letra,
que me sugiere un dibujo,
que me canta una canción.
Yo no escribo lo que quiero,
pero quiero lo que escribo,
eso que quiere en mí quiero,
eso que quiere en mí sigo.
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